Cómo tratar la gripe con medios naturales
Fortalecer el organismo y tratar la gripe con remedios naturales eficaces es la mejor manera de pasarla sin recurrir a medicamentos con efectos secundarios.
La gripe es una de las enfermedades víricas mejor conocidas, y como todas ellas, no responde al tratamiento antibiótico. Ahora bien, hay remedios caseros que ayudan a pasarla y superarla de forma saludable.
¿ES NECESARIO VACUNARSE DE LA GRIPE?
Oficialmente se recomienda vacunarse si se pertenece a un grupo de riesgo, como los mayores de 65 años y quienes padezcan o hayan padecido afecciones pulmonares importantes, especialmente tras haber pasado la gripe.
Pero muchas personas lo rechazan alegando que les produce síntomas de gripe. De hecho, es una vacuna muy cuestionada, tanto por este motivo como por las dudas sobre su eficacia.
La eficacia de la vacuna de la gripe se cifra habitualmente entre el 40 y el 65%; es decir, en uno de cada dos o tres casos la eficacia resulta dudosa, y en un 10% de los casos produce a la persona síntomas pseudogripales.
Si contraes la gripe, piensa que pasarla es una de las mejores formas de vacunarte, pues se conserva una resistencia a padecerla de unos cuatro años, hasta que el virus haya mutado lo suficiente para que el organismo no lo reconozca.
¿CÓMO TRATO LA GRIPE?
La gripe suele manifestarse con nariz congestionada, faringe irritada, tos, dolor de cabeza, de huesos, fiebre o escalofríos. Para reducir su intensidad y duración, y para prevenir complicaciones, puedes recurrir a las siguientes medidas.
- Una opción son los antigripales, pero no lo recomiendo: solo apagan los síntomas para seguir con el frenesí diario, aunque el cuerpo nos pida lo contrario: parar.
- Zinc. Este mineral parece reducir la duración y las complicaciones de la gripe, posiblemente porque impide la replicación de los rinovirus. Se puede tomar en forma de comprimido o jarabe, y también en gargarismos o espray nasal.
- Vitamina C. Mejor de origen natural, como la que contienen frutas o bayas. Además, ante la desgana habitual de la fiebre, sienta muy bien consumir más fruta. Son adecuados el jugo de naranja, los arándanos y otros frutos del bosque, fresas, uvas… y la infusión de escaramujo. También puedes tomar suplementos de vitamina C. No cura, pero estimula las defensas de forma rápida. Las bayas, además de vitamina C, contienen polifenoles con una cierta acción antiviral.
- Infusión pectoral. Prepara una infusión con tomillo, sauce, malva y violeta, y la endulzas con miel añadiendo un chorrito de limón. Puedes tomar esta infusión tres o cuatro veces al día como tratamiento natural idóneo de la gripe sin complicaciones.
- Hidrátate bien. Bebe agua o infusiones para mejorar la eliminación por los riñones y, especialmente, para evitar la tos seca sin mucosidad. El agua es depurativa y a veces, en un proceso gripal, es lo único que nos entra. No te preocupes si comes poco; esto también es una respuesta del cuerpo ante el proceso febril.
- Toma miel. Tiene acción pectoral y antimicrobiana, es eficaz en todas las edades y se puede consumir a partir de los doce meses de edad. Una forma de consumirla es disolverla en agua caliente o en una infusión. Un chorrito de limón le va estupendamente para completar el efecto terapéutico.
- Equinácea. Es idónea para prevenir gripes y resfriados, no tanto para tratarlos. Toma 1 caja (3 cápsulas al día durante 10 días) al llegar el invierno, como protección y estímulo de las defensas.
- Ajo. Expectorante y con cierto efecto antiinfeccioso. La mejor forma de tomarlo es crudo, 1 diente al día. Las sopas de ajo conservan el poder expectorante (no el antiinfeccioso)
- Descansa. El cuerpo nos suele indicar muy bien qué debemos hacer, y ante la fiebre, el dolor de cabeza y la tos nos pide que descansemos. Es muy importante para pasar la gripe con los menores efectos posibles.
EVITA COMPLICACIONES
La gripe es un proceso común, pero algunas veces se complica. En estos casos debemos acudir al médico, especialmente si padecemos estos síntomas:
- Congestión de dos o más semanas, con agravamiento posterior.
- Síntomas severos: dolor, fiebre, expectoración verdosa.
- Disnea: falta de aire, te quedas sin respiración.
- Los niños y niñas de hasta tres meses, embarazadas, personas de la tercera edad de más de 75 años o con patología respiratoria previa deben acudir al médico desde el primer momento.