Violencia indiscriminada

Una mujer fallecida y dos niñas heridas de bala fue el resultado de un ataque armado perpetrado por dos sicarios que se conducían a bordo de una motocicleta, a quienes no les importó que su víctima estuviera frente a una escuela pública, ubicada en una colonia de la zona 18 de la ciudad capital.

El ataque se produjo cerca de las 16:00 horas de ayer, a pocos metros de la entrada del centro educativo, donde quedó sin vida el cuerpo de la mujer identificada como Aracely Garzaro de 42 años mientras que las dos niñas de 3 y 5 años fueron ingresadas a la emergencia del Hospital General San Juan de Dios, pues sufrieron heridas por los proyectiles disparados por los sicarios (una de ellas quedó herida de su mano y la otra recibió un impacto en la barbilla).

De acuerdo con información de los cuerpos de socorro que atendieron a las niñas, ambas permanecen en estado estable. Sin embargo es necesario destacar que si bien, afortunadamente sus vidas no corren peligro, el trauma psicológico luego de haber vivido un hecho de esta naturaleza les acompañará por el resto de su vida.

Es imperativo que las autoridades encuentren la ruta para frenar la imparable violencia, pues esta no respeta edad, ni sexo y cada día enluta o daña patológicamente a más y más familias.

Los guatemaltecos estamos cansados de vivir entre el miedo y zozobra ante tanto hecho violento que, como el de ayer riega nuestro suelo con sangre, muchas veces inocente, mientras quienes la derraman, permanecen al abrigo de la impunidad.