Saquean negocios en edificio
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El guardia de seguridad Carlos Choc Rax, de 25 años, cayó en la trampa de la belleza de una mujer atractiva, quien tras conquistarlo le invitó a beber algo, lo cual contenía un somnífero y a continuación hizo su efecto. Lo anterior fue aprovechado por el resto del grupo criminal que ingresó para saquear varios locales de un edificio ubicado en la 3ª. calle y 6ª. avenida de la zona 9 capitalina.
Aparentemente, el robo se produjo en horas de la noche del Sábado de Gloria o la madrugada de ayer, pues Onel Alberto Medrano Santos, supervisor de la empresa privada de seguridad, en su rutina de inspección observó al agente de turno en el suelo bajo efectos de alguna droga, y se percató que las puertas estaban abiertas y esto le hizo suponer que desconocidos habían ingresado a robar, lo cual fue confirmado al darse cuenta que diferentes oficinas del edificio fueron saqueadas, y a continuación dio la voz de alerta.
Las autoridades establecieron que de una caja fuerte sustrajeron varias chequeras y Q18 mil en efectivo, así como 100 acciones de la Sociedad Anónima Servicios Generalizados de Occidente valoradas en Q5 millones.
El reporte de la comisaría 11 de la Policía Nacional Civil (PNC) establece los maleantes se robaron un lote de computadoras, dos computadoras portátiles, tablets, joyas y dinero en efectivo que asciende a un valor de Q157 mil, mientras al custodio Carlos Choc le despojaron de su revólver que forma parte de su equipo.
Los bomberos Voluntarios se presentaron al lugar para brindar los primeros auxilios al agente de seguridad, sin embargo, aunque estaba todavía bajo el efecto de la droga, no fue necesario trasladarlo a un centro hospitalario.
Mientras, fiscales y peritos del Ministerio Público (MP) realizaron las pesquisas en los seis niveles del edificio, en donde comprobaron que los delincuentes penetraron a las oficinas para saquearlo, supuestamente utilizaron un vehículo para llevar lo robado, pues tuvieron suficiente tiempo para vaciar los locales.
Se llevaron hasta las cámaras de vigilancia
Tanto los investigadores policiacos como fiscales del Ministerio Público establecieron que los saqueadores fueron muy cuidadosos con las cámaras de vigilancia, pues sabían perfectamente que fueron grabados, antes de huir se llevaron la consola de grabación en donde está almacenada la filmación.
“Siempre caen en la misma trampa los agentes, no hay supervisión por parte de sus jefes, por un jugo abrió la puerta de acceso, todo es electrónico para ingresar, nadie entra sin plena identificación”, dijo el comisario Héctor García Alvarado, jefe de la comisaria 11 de la PNC.
