Niños secuestrados aparecen encostalados
“Mi hijo es inocente, no merecía morir así, estoy triste por la tragedia, lo único que me queda es exigir justicia por su muerte, no puede quedar así, si apenas son unos niños dedicados a los estudios, ojalá que agarren a esos asesinos”, es el relato del padre de familia Maximiliano Xiquín, quien lloró amargamente al ver el cadáver de su hijo Carlos Daniel Xiquín Top, encostalado junto con otro compañero, ambos atados de pies y manos.
Desde de las 7:30 de la mañana de ayer, a orillas de la carretera de terracería que comunica con la aldea Cruz Blanca, San Juan Sacatepéquez, los vecinos descubrieron dos costales de color blanco, creyeron que se trataba de arena que habían abandonado, sin embargo, al acercarse notaron manchas de sangre, bastante asustados llamaron a los bomberos Voluntarios que acudieron con una ambulancia, al revisar el contenido se llevaron la gran sorpresa que se trataba de los cadáveres de dos niños, atados de pies y manos, aparentemente estrangulados con un lazo amarillo.
La noticia corrió como pólvora entre los lugareños, que acudieron a la escena del crimen junto con los padres de familia, quienes reconocieron plenamente a sus hijos. Se trata de Carlos Daniel Xiquín Top, de 9 años, y Oscar Armando Top Cotzajay, de 11, estudiantes de tercero y cuarto grado de primaria, del caserío Ajuixes, aldea Cerro Alto, San Juan Sacatepéquez, que fueron secuestrados el viernes pasado a las 7:30 de la mañana, cuando se dirigían a estudiar, ya que fueron interceptados por ocupantes de un carro negro que se los llevaron con rumbo ignorado, aunque estuvieron buscándolos ya no los hallaron.
Exigían Q1 millón por la liberación
“Somos gente pobre, a dónde vamos a conseguir tanto dinero si no tenemos, nos dedicamos a hacer canasto, es nuestro negocio, me estuvieron llamando por el celular varias veces el fin de semana, primero me pidieron Q1 millón, luego lo bajaron a Q20 mil y por último Q200 mil, pero me advirtieron que si no conseguía el pago me iban a matar a mi hijo, no puedo creer lo que estoy viviendo, mi patojo era bien entusiasta, sospechamos de un carro que ya tenía varias semanas que estaba llegando en nuestra comunidad, sabemos que en el secuestro participó una mujer de corte”, decía la señora María Cotzajay, madre de Oscar Top Cotzajay.