Ante el dolor de una madre
Hoy, una madre más se encuentra adolorida, pues uno de sus hijos, quien tenía la ilusión de mantener a la esposa y sus dos pequeños, murió ayer a manos de un sicario, que con toda impunidad le disparó. Aún no se puede comprender qué es lo que pasa por la mente de estas personas, que sin el menor temor portan un arma y en cualquier momento la accionan contra sus objetivos.
José Luis Marroquín Gómez conducía un bus urbano, el cual había salido de la aldea Lo de Coy, se dirigía a la cabecera municipal de Mixco, pero al llegar al kilómetro 18.2 de la ruta Interamericana, el pistolero le atacó, y al perder el control del vehículo se fue a empotrar a una pasarela. Lo triste de este caso es que el hombre había salido a trabajar desde temprana hora, para poder reunir dinero para celebrar el cumpleaños de uno de sus pequeños, y que no solo no lo festejó, sino que este día será recordado también con dolor por el asesinato del jefe de ese hogar.
Las palabras de consuelo que se le puedan decir a esta destrozada madre, realmente no podrán aliviar su carga, pero como ella mismo dijo, que a Dios le dejaba la justicia, entonces sólo Él le dará el bálsamo para su pena. Pero la ola de crímenes no cesa, también ayer, en la avenida Centroamérica y 13 calle de la zona 1 capitalina, fueron atacados a tiros Germán Muñoz y Sandra Patricia Roldán Cac, ambos viajaban en una motocicleta. Fue un crimen a todas luces planificado, ya que fueron cuatro asesinos los que les dispararon, en el lugar murió Muñoz. Aquí, como ya lo hemos dicho en ocasiones anteriores, se puede apreciar el odio que hay entre los guatemaltecos, que los lleva a cobrar viejas rencillas, empleando la violencia para limpiar una afrenta.
Pues, según las autoridades, la víctima mortal había estado preso por un crimen y, tras cumplir la sentencia impuesta en una cárcel del sistema, recientemente había recobrado su libertad. En Mixco, las personas se sienten desprotegidas y reclaman que vuelvan los destacamentos militares porque, según ellos, la Policía Nacional Civil (PNC) ya no puede brindar la protección a la población civil. Mientras hay quienes exigen al gobierno implementar de nuevo la pena de muerte.