Garantizan su derecho a costa del de otros
La Coordinadora de Desarrollo Campesino (Codeca) dio una muestra de fuerza ayer.
Unos 20 mil de sus integrantes viajaron a la capital y, apostándose en varios puntos claves de acceso a la ciudad, taparon el paso para luego encaminarse hasta el Centro Histórico, donde se reunieron para manifestar públicamente su descontento con la situación del país.
Los manifestantes bloquearon la calzada Raúl Aguilar Batres, también la calzada Roosevelt y la entrada a la ciudad por el lado de la carretera al Atlántico.
Otro grupo se reunió en El Obelisco y todos marcharon con rumbo al centro de la ciudad, causando caos vial.
En términos generales, exigían luchar contra la corrupción, expulsar a los diputados corruptos del Congreso y legislar para impedir la reelección de los legisladores.
Finalmente se juntaron en la Plaza de la Constitución, lanzando consignas y exigiendo se cumplan sus peticiones.
La multitud que ocupó buena parte de la plaza, al filo de las 11 de la mañana, ya había generado caos vial en la ciudad, ocasionando que muchos estudiantes no lograran llegar a tiempo a sus centros de estudios, mientras otros guatemaltecos no consiguieron transportarse para llegar a sus puestos de trabajo.
Así se desarrolló la jornada en la que los campesinos hicieron valer el derecho constitucional de manifestación, pero a costa de violentar el derecho de locomoción de otros connacionales que nada tienen que ver o pagar por su descontento.
A eso no se le puede llamar estado de Derecho, a garantizar el propio a costa del de los demás.