Se opuso al robo del dinero
Una pareja menores exigió el dinero al repartidor de agua purificada, pero se negó y lo mataron
El repartidor de agua purificada, Julio César Chamalé Tubac, de 30 años, se encontraba repartiendo varios garrafones de dicho producto en el barrio La Reformita, en la zona 12 capitalina, cuando una pareja de menores se le acercó y bajo amenazas de muerte le exigieron que les entregara el dinero. El empleado se opuso y fue asesinado a tiros.
Eran las ocho de la mañana cuando Chamalé Tubac se apresuraba a entregar el producto a los clientes, sobre la 26 calle y 1a. avenida del mencionado barrio, cuando dos jóvenes, un hombre y una mujer, lo siguieron hasta que le interceptaron el paso y le hablaron por un momento, para exigir que les diera el efectivo de la venta. Ante esto, el repartidor les indicó que “no tengo dinero, apenas estoy empezando a vender”.
DOS JÓVENES LO ULTIMARON
Según el testimonio de un vecino que presenció el crimen, hubo intercambio de palabras entre el vendedor y la pareja. Momentos después uno de los agresores desenfundó un revólver y disparó varias veces contra Julio César hasta dejarlo tendido sobre la acera. Luego, los supuestos delincuentes salieron corriendo para abordar un automóvil rojo que los estaba esperando y huyeron del lugar.
Los bomberos voluntarios que acudieron a la escena del crimen evaluaron a la víctima y establecieron que tenía seis heridas de bala: tres perforaciones en la cabeza, una en la boca y dos en la mano derecha, pues así trató de defenderse de los balazos.
José Manuel Ruano, compañero de trabajo, corrió hacia el lugar del suceso, para ver qué había sucedido. Pero la sorpresa fue ver a su amigo desplomado en el suelo. No pudo contenerse y lloró encima del cadáver, y luego contó: “Teníamos un año de trabajar juntos. Hoy madrugamos para salir rápido del lugar, aunque me indicó que no había desayunado, por lo que tenía dolor de estómago. Era como un aviso de que algo iba suceder”.
8:00 de la mañana, hora cuando sucedió el ataque armado donde murió Julio César Chamalé.
6 heridas de bala presentaba el cadáver del repartidor de agua.
Agentes de la PNC rastrearon el área en búsqueda de los criminales.
El MP no halló evidencia alguna en la escena del crimen.
Julio César Chamalé tenía varios años trabajar como repartidor de agua purificada.