Cuestionable protesta sindical
De nuevo, el movimiento salubrista sindicalizado del país salió a las calles ayer. Como ha sido usual en sus prácticas, bloquearon al menos tres puntos importantes de tráfico vehicular. El más notorio para los capitalinos fue el de la calzada Aguilar Batres. Pero también afectaron a quienes transitaron por la ruta al Atlántico, donde bloquearon dos pasos, uno en el kilómetro 72, a la altura de Guastatoya, El Progreso, y otro en el kilómetro 132, en Río Hondo, Zacapa.
Los inconformes ejercieron presión durante un lapso aproximado de seis horas, tiempo durante el cual exigieron a las autoridades el pago de viáticos y un bono de Q2 mil. Pero valga aclarar que se trata de unos viáticos cuestionados, pues desde el año anterior las autoridades reclaman que se habla de un cobro que tiene como respaldo los viajes que hacen para asistir a las protestas.
Es decir que el pueblo de Guatemala no solo les paga sus salarios sino que, encima, también les paga porque no trabajen y, en cambio, efectúen actividades que terminan afectando a los mismos guatemaltecos.
¿Será eso justo? seguro que no.
Y cuando hablan del reclamo por falta de insumos en los hospitales, resulta siendo otro tema poco creíble en sus bocas. Por décadas han realizado manifestaciones similares y resulta que, una vez hacen efectivo el dinero que exigen, se olvidan de los insumos y de las precarias condiciones en que los hospitales reciben a los guatemaltecos que, al final, son quienes sostienen el pago de los salarios de estos señores, así como el mantenimiento de los centros asistenciales.