Búsqueda implacable

PNC tras la pista de los asesinos de niño y de sus abuelos.

Un operativo a gran escala se efectuó ayer en el asentamiento La Unión, anexo a la colonia Villalobos Uno, zona 12 de Villa Nueva, para ubicar pistas en torno al grupo de asesinos que dio muerte de manera “salvaje” a un niño de tres años y a sus abuelos.

Aparte de “peinar” el área fueron allanadas tres viviendas en las cuales se hallaron varias evidencias que serán analizadas cuidadosamente para poder identificar a los integrantes del grupo de sicarios.

El cateo

Las diligencias iniciaron a las seis de la mañana, los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) uniformados y de civil, juntos a fiscales del Ministerio Público (MP) allanaron tres viviendas ubicada en la 13 avenida asentamiento La Unión.

En el interior de la casa de Joselyn Yanira López Sacbá, de 20, madre del menor asesinado, y quien actualmente guarda prisión en la cárcel de Santa Teresa en la zona 18, las autoridades hallaron varios indicios como un chaleco antibalas y cartuchos útiles para escopeta.

La mujer fue detenida cuando acudió a la morgue del Inacif en la zona 3, a reclamar el cadáver de su hijo, ya que existía una orden de captura en su contra por los delitos de obstrucción extorsiva del tránsito y asociación ilícita, ya que forma parte de estructura criminal que opera en la colonia Villalobos, y al ser arrestada no pudo velar ni mucho menos enterrar a su bebé.

Crimen repudiado

Diversos sectores han repudiado la forma brutal que los sicarios dieron muerte al niño Edwin Daniel López Sacbá, ya que no solo lo balearon sino que le dieron el tiro de gracia y el pequeño quedó con una bolsa de juguetes en su mano derecha.

Mientras su abuela, Zoila Esperanza Sacbá, quedó tendida en el interior de una vivienda, a pocos metros quedó sin vida José Manuel Barrios Marroquín, de 40, alias El Cholo, quien estuvo preso por siete años.

Líneas de investigación

La primera hipótesis de los detectives del Departamento de Delitos Contra la vida, de la PNC, y las fiscalía del Ministerio Público de Villa Nueva, revelan que José Barrios Marroquín, quien cumplió una condena de siete años, se dedicaba al sicariato, y recientemente había recobrado su libertad, y volvió a las andadas, ya que se reunía con sus cómplices en el lote 16 que fue allanado ayer, por lo que se sospecha que el móvil fue una venganza entre los mismos pandilleros, ya que el sector es dominado por la clica de la “Mara 18”.