Lapidado y quemado
El albañil Rudy Porfirio Gonzales Garrido, de 63 años, fue encontrado muerto frente al portón de una casa ,ubicada en las cercanías de la iglesia católica de la aldea Los Chorros, en San Antonio la Paz, El Progreso, en donde por causas que se ignoran fue asesinado brutalmente a pedradas y los asesinos, no contentos con eso, le rociaron combustible y le prendieron fuego.
Al parecer, los agresores persiguieron a su víctima para robarle, tras haber una posible oposición del sexagenario, a quien golpearon con un bate y luego de prenderle fuego le colocaron una lona encima.
“Me dirigía a mi terreno a eso de las 5 de la madrugada y observé un bulto cerca de este portón de malla, me dio curiosidad y me acerqué para llevarme la sorpresa de ver un cadáver, e inmediatamente llamé a la Policía, sin imaginarme que se trataba de un gran amigo”, dijo entre lágrimas un hombre que prefirió no identificarse.
“Él no se metía con nadie, todavía pasamos juntos viendo un partido de futbol en el campo y tomándonos unas cervezas, y de ahí se fue para su casa”, dijo el amigo del occiso.
Bruna Leonor Castillo Pineda, de 62, esposa de Gonzales, expresó: “Él salió el domingo en la mañana a cobrar un dinero que le debía su patrón, ya que trabaja como albañil y, a eso del mediodía, mi hijo más grande lo vio por el campo de las piscinas, pero de ahí no supimos más de él. No entiendo por qué lo asesinaron de una manera cruel, si él no se metía con nadie”, agregó.
Agentes de la PNC, entre sus hipótesis manejan que este crimen pueda ser un posible robo, ya que los asesinos al parecer le quitaron sus botas y el dinero de su pago.
Peritos del Ministerio Público en la escena del crimen localizaron un sombrero ensangrentado entre unos palos de izote, a unos 50 metros de donde quedó la víctima.