Si la policía siempre vigilara, habría menos delitos

Como en una escena de Hollywood, la madrugada de ayer sirvió de escenario para una persecución peliculesca de policías y ladrones.

Por el Centro Histórico, una patrulla de la Policía Nacional Civil (PNC) inició la corrida de otro automotor, tipo taxi, en el se conducían cuatro individuos que recién habían dado muerte a Kevin Saúl Soto Aragón, de 23 años.

Ya en camino, la patrulla solicitó refuerzos, con los que minutos más tarde se logró copar a los delincuentes.

En la 11 avenida y 14 calle lograron interceptar el taxi color corinto en el que se conducían los malhechores que, tras ver que estaban rodeados, no hicieron más que rendirse.

Pudieron haber retado a la autoridad, pues portaban armas como para hacerlo. Pero optaron por resguardar sus vidas y se entregaron.

Los sicarios fueron identificados, pero aún se investigan las razones del ataque. Lo cierto es que ahora sí se puede utilizar aquel dicho que reza: La policía siempre vigila.

Y la acción de ayer nos demuestra, además, que cuando hay patrullajes continuos las probabilidades de prevenir un delito o de capturar a los hechores de uno, son mayores.

Por eso se debe trabajar en pro de dotar a la PNC de los recursos necesarios para que pueda cumplir su labor a cabalidad.

Tener patrullas y combustible suficiente para las rondas y persecuciones, así como armamento capaz de enfrentar a cualquier delincuente, además de equipos de comunicación que faciliten coordinar sus acciones, siempre será algo importante para que las fuerzas de la seguridad ciudadana puedan cumplir su labor a cabalidad.

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